domingo, 4 de diciembre de 2011

Domingo II Adviento (B) (04/12/11)

Prepara el camino y camina
La Palabra
Is 40, 1-5. 9-11 // Sal 84, 9-14 // 2Pe 3, 8-14
Comienza la Buena Noticia de Jesucristo. [Hijo de Dios.] Tal como está escrito en la profecía de Isaías: Mira, envío por delante a mi mensajero para que te prepare el camino. Una voz clama en el desierto: Preparad el camino al Señor, allanad sus senderos. Así se presentó Juan en el desierto, bautizando y predicando un bautismo de arrepentimiento para el perdón de los pecados. Toda la población de Judea y de Jerusalén acudía a él, y se hacía bautizar por él en el río Jordán, confesando sus pecados. Juan llevaba un manto hecho de pelos de camello, con un cinturón de cuero en la cintura, y comía saltamontes y miel silvestre. Y predicaba así: ---Detrás de mí viene uno con más autoridad que yo, y yo no tengo derecho a agacharme para soltarle la correa de sus sandalias. Yo os bautizo con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo.
Mc 1, 1-8
El Comentario

Comienza la Buena Noticia…
Con estas palabras comienza el Evangelio de Marcos. No son malas estas palabras, que deberíamos recordarlas más a menudo, que hace mas de dos mil años se nos anunció la Buena Noticia. Parece que vivimos en el mundo, pero que nada bueno sucede, que no hay razones por las que vivir, que la alegría es para otros, que… vivimos en un mundo lleno de desesperanza, de frustraciones, de fracasos, de…
Está claro que para todos nosotros cada día debe comenzar la Buena Noticia, y es bueno, no solo que nos lo recuerden, sino que nosotros seamos capaces de recordar cada día que hay una Buena Noticia, y que esta está dirigida a todos y a cada uno de nosotros, que aunque parezca que todo está mal, que no nos sale nada bien, que no damos una, que… que hay una Buena Noticia, que en algún lugar hay alguien esperándonos, alguien que nos apoyará incondicionalmente, que se preocupa de si estamos bien o mal, de nuestros problemas diarios… en definitiva, alguien que nos ama incondicionalmente.
Nadie dice que sea sencillo encontrar a esa persona, ni que la búsqueda no sea complicada, ojalá fuera una tarea sencilla, pero no lo es.
Afortunado es aquél que en este mundo la encuentra, o es capaz de ver en el otro a esta persona, y más afortunado es si tiene la suerte de vivir con el los días que le resten de su vida, pero también debemos descubrir que Jesús forma parte también de nuestra vida, que cuando parece que nadie camina con nosotros Él si lo está haciendo, que se pone siempre de nuestro lado, aunque debamos encontrarlo en lo más profundo de nuestro ser o en las personas que pasan sin darnos cuenta a nuestro lado.
Ponte en camino, o mejor en movimiento y descubre donde ver su rostro.
Que seas feliz con la Buena Noticia.
¿Qué Celebramos?
Los profetas mantenían encendida la esperanza de Israel.
Nosotros, como un símbolo,
encendemos estas dos velas.
El viejo tronco está rebrotando, florece el desierto.
La humanidad entera se estremece porque Dios se ha sembrado en nuestra carne.
Que cada uno de nosotros, Señor, te abra su vida para que brotes, 
para que florezcas, para que nazcas y mantengas en nuestro corazón
encendida la esperanza.
¡Ven pronto, Señor. Ven, Salvador!
Día del Minusválido (3 de Diciembre)